El robot fue desarrollado por la empresa francesa Aldebaran Robotics, pero presentado por IBM en la Argentina. Lo que hizo la empresa es dotarlo de Watson, un programa que permite a Gardelito aprender y ser prácticamente autónomo.
Con 58 centímetros de altura y una apariencia similar a la de una persona, Gardelito funciona en base a un software cognitivo que le permite interactuar, resolver desafíos y responder preguntas.
Este programa se llama “Watson”, un desarrollo que facilita el almacenamiento y el uso de datos de forma “natural” y “selectiva” a partir de una carga informática, un estímulo verbal o el procesamiento de una imagen.
“El sistema incorpora información y a la hora de dar una respuesta se maneja por un ranking probabilístico. Selecciona la mejor respuesta para una pregunta determinada. A medida que lo va haciendo se perfecciona su capacidad de responder y lo que no es correcto se modifica. Eso permite llegar a un mayor grado de certeza”, detalló Stella Loiacono, directora de Tecnología de IBM Argentina, acerca de la capacidad cognitiva de Gardelito.
“Por ahora Gardelito funciona bajo la modalidad de ‘pregunta y respuesta’. Hace poco se le incorporó un módulo de conversación. Eso puede, con el tiempo, evolucionar a una comunicación más fluida, ya que el manejo del lenguaje natural es muy bueno”, aclaró, según detalla la agencia de noticias Télam.
Gardelito no es solo palabras: es capaz de aprender movimientos y luego aplicarlos en caso de ser necesario. Para ello, el robot copia a quien se le indique gracias a sus cámaras y sensores de movimiento.
IBM continúa analizado qué utilidad práctica podría tener Gardelito, pero confía en que podría resultar en un asesor para distintos profesionales en industrias.