Costa Rica era hasta ahora el mejor ejemplo de cómo vivir 100% gracias a energías renovables, pero una isla del Pacífico emergió como la gran competidora.
La isla de Ta’u, en Samoa, posee paneles solares capaces de producir 1,4 megavatios para cubrir casi el 100% de la energía que necesita para funcionar.
Ta’u posee en total 5.328 paneles solares y 60 PowerPacks (baterías) para alcanzar un almacenamiento de 6 megavatios/hora. El proyecto es parte de un plan de SolarCity, empresa que Tesla compró por u$s2.600 millones.
Ta’u tiene apenas 600 habitantes y una gran cantidad de días con sol, pero el modelo es escalable, creen en SolarCity, sobre todo a territorios en donde la producción de energía resulta caro, poco eficiente y enemigo del medio ambiente.
Ta’u obtenía hasta ahora su energía de generadores a diesel, un combustible caro, contaminante y que también suponía grandes retos para el envío y administración de los barriles. El precio oscilante del combustible tampoco les permitía tener cierta planificación sobre costos.
El funcionamiento con energía solar en Ta’u es solo el comienzo del plan de Tesla para que más territorios comiencen a aplicar este tipo de soluciones, no solo amigables con el medio ambiente sino además más eficientes y económicas.
Tesla exhibió hace pocos días su Solar Roof, un techo solar imposible de distinguir frente a uno convencional y que se espera también sea más económico.