Apple, Google y Facebook son las empresas que más esfuerzos hicieron para emplear el 100% de energías renovables en su funcionamiento, una lista en donde Netflix, Amazon Web Services y Samsung quedan rezagadas.
Así lo destacó el informe Clicking Clean 2017 de Greenpeace, trabajo donde rastrearon la huella energética de los operadores de los mayores centros de datos y de casi 70 de los sitios y aplicaciones más populares del mundo.
Sara Pizzinato, responsable de Energía de Greenpeace España, explicó cómo afecta el avance de los servicios web en distintas partes del mundo. Entre los ejemplos mencionó a Amazon y Netflix, que poseen políticas energéticas poco claras y se expanden por mercados en donde la electricidad es generada mayoritariamente con energía sucia.
Entre las compañías principales, Apple, Facebook y Google obtuvieron una A. Debajo, con B, quedó Microsoft, muy por encima de Samsung, que finalizó con una D.
Entre las empresas que basan su negocio en internet, la única con A fue YouTube. HBO, Netflix y Vimeo obtuvieron una D.
“El streaming de videos representa la mayor causa de demanda de datos, siendo el 63% del tráfico global en internet en 2015. Y la cifra no para de crecer: se prevé que alcanzará una cuota del 80% en 2020. Eso necesita un montón de energía. Pero al ser parte de la familia de Google, YouTube también se comprometió al objetivo de alimentarse 100% con energías renovables”, dijo Greenpeace.
El panorama no fue igual con Twitter y Netflix. “¿Los mensajes de 140 caracteres pueden ayudar a que el mundo sea más verde? ¡Sin duda! Todos los días se mandan unos 500 millones de tuits que causan la emisión diaria de unas 10 toneladas de CO2. Esta es la razón por la que sería sencillamente genial que nuestros tuits fueran alimentados por renovables, algo que no sucede en la actualidad”, remarcó la organización y agregó que “Netflix todavía está enganchado a energías antiguas y sucias como el carbón”.
Greenpeace analizó por primera vez a compañías asiáticas como Tencent, Baidu, Alibaba y Naver. Determinó que están “muy por detrás del mercado de los EEUU en cuanto a compromisos renovables adquiridos”, algunas veces por las dificultades para elegir suministros de energía limpia “ya que allí normalmente los mercados eléctricos son monopolios”.
Vía: Greenpeace