Los mejores centros de enseñanza del futuro serán aquellos que integren la tecnología en las aulas y en sus procesos de «back-office», sostuvo Ricoh, que a través de un documento explicó que los cambios que impulsan las nuevas tecnologías crean “un nuevo futuro para todas las vertientes que participan en las organizaciones del sector de la educación, incluyendo directivos, alumnado y docencia”.
“El resultado final será un entorno que enriquecerá la interacción entre el profesorado, la tecnología y el alumnado”, remarcó la empresa y enumeró las cinco tendencias que transformarán la relación entre profesores, estudiantes y administradores en las universidades gracias a la adopción de nuevas tecnologías.
-Experiencia Colaborativa. La misma ocurre mediante una interacción grupal y la exploración de diferentes perspectivas de otros estudiantes y docentes. El papel del docente es convertirse en facilitador más que un catedrático. Para ello, las herramientas colaborativas vía teleconferencia/IWB ayudan a unir a los estudiantes y la colaboración entre clases/sitios en un ejercicio compartido de descubrimiento y creación de conocimientos antes de empezar cada clase. Además, permite desarrollar las aptitudes y trabajo en equipo que los estudiantes enfrentarán en sus vidas profesionales.
-Experiencia Diferenciada. El aprendizaje en línea brinda mayor flexibilidad que los programas de un campus tradicional. La tecnología permite no solo la flexibilidad de tiempo sino también empodera a los estudiantes para revisar aquellos temas que no se comprendieron en su totalidad. Ese es el concepto de «a mi propio ritmo», en el cual el estudiante esta 100 % en control del proceso de aprendizaje. En las aulas físicas, los docentes también entendieron que no todos los estudiantes aprenden al mismo ritmo. Dividir a la clase en grupos ayuda al docente a avanzar a diferentes velocidades y niveles de acuerdo con Thought Leadership White Paper cada grupo. Además, el aprendizaje en línea está evolucionando a ritmos vertiginosos, el progreso en learning analytics, adaptive learning y una combinación de herramientas sincrónicas y asincrónicas de úìltima generación, continuará avanzando el estado del aprendizaje online.
-Contenido Alineado. Aunque internet posibilita el intercambio de servicios e información, para utilizarlo en su máximo potencial hay que tener también foco en la seguridad. Las herramientas como el manejo de la identidad y el acceso están diseñados para asegurar que aquellos que accedan a los recursos (centros de datos, bases de datos, instrumentos remotos, recursos de aprendizaje, etc.) sean confiables, tanto en la seguridad de sistemas como en la confiabilidad de la información. La habilidad de compartir recursos más allá de las limitaciones del Campus físico depende del manejo de la confianza, la identidad y el acceso. El alumno, que, en teoría, tiene acceso ilimitado a fuentes de conocimiento online se convierte en un “curador”, donde es necesario el pensamiento crítico para validar y seleccionar el contenido.
-La evaluación basada en datos. A medida que los alumnos participan en actividades formativas online, dejan un mayor rastro de información que puede recopilarse y analizar con el objetivo de personalizar la experiencia del aprendizaje y medir el desempeño, más allá de las pruebas de evaluación tradicionales. Se calcula que en un plazo de entre tres y cinco años el análisis del rastro que dejan los alumnos -learning analytics permitirá mejorar las estrategias y procesos de aprendizaje. Además, las herramientas de inteligencia artificial (también conocido como – learning machine-), podrían detectar patrones de aprendizaje e indicar acciones correctivas en el aprendizaje con el fin de mejorar el rendimiento del alumno. Por parte de la universidad, esto también permitiría descubrir qué alumnos tienen más riesgos de no concluir el curso y tomar acciones correctivas evitando así la evasión escolar.
-La creciente ubicuidad de las redes sociales. Los medios sociales se están integrando muy rápidamente en la vida universitaria, actuando como plataformas de formación o como herramientas para articular comunidades educativas. Aunque todavía no está claro cómo acabaran transformando a las universidades, su impacto en el sector de la Educación Superior será muy significativo durante los próximos dos años.
¿Cómo ayuda Ricoh en esta transformación educativa? Las soluciones de Ricoh ayudan a las instituciones educativas en dos vertientes principales. La primera, que impacta directamente al rendimiento del estudiante a través del uso de herramientas como el “aula inteligente” o los analíticos y que permiten potencializar los conceptos de experiencia colaborativa, experiencia diferenciada y el contenido alineado.
El segundo se focaliza en los empleados de las universidades. Ricoh cuenta con herramientas que mejoran procesos e incrementan la eficiencia de las instituciones como un todo (no solo del docente) y a generar una mejor experiencia para los estudiantes. Por ejemplo, en la creación de una tienda de impresiones por medio del cloud en cualquier parte y a cualquier hora, o implementando las herramientas y procesos que ayudarán a las facultades a calificar exámenes más rápidamente y con exactitud para que los estudiantes puedan chequear y retirar sus calificaciones y registros a su conveniencia.