Las ventas de celulares en la Argentina totalizaron las 3,5 millones de unidades en el primer semestre de 2017, lejos de las 4,5 millones alcanzadas en el mismo periodo de 2016.
De acuerdo con los datos de la Cámara de Agentes de Telecomunicaciones Móviles de Argentina (Catema), las consecuencias de esa situación se resumen en el cierre de más de 500 locales a nivel nacional y la pérdida de aproximadamente 2.000 puestos de trabajo en los últimos 9 meses.
“Los agentes oficiales de las operadoras, el principal canal de comercialización de teléfonos en el país, registraron en promedio una caída en la facturación del 30% durante el periodo comprendido entre enero y junio”, remarcó la organización.
El sector reclamó medidas que fomenten el consumo interno, en conjunto con otras que posibiliten bajar los costos de producción.
Causas
De acuerdo con Catema, el comportamiento negativo en las ventas tiene dos causas: el mercado informal y los elevados precios de los dispositivos.
“De las 12 millones de unidades que se comercializan por año, se estima que más de 4,5 millones son adquiridas en el denominado “mercado negro”, que contempla el contrabando de equipos y la venta de celulares robados”, sentenció Catema.
Por otro lado, Jorge Giordano, gerente de Catema, resumió: “Otro elemento que afectó el desempeño comercial es el elevado precio de los smartphones. El segmento con mayor volumen de ventas es el de equipos de entre AR$2.000 y AR$4.500. Lamentablemente, en Argentina el precio final de los equipos es muy elevado. Chile, en comparación, tiene una importación directa más barata”.
Leonardo Rajchert, presidente de la organización, se mostró confiado en torno al comportamiento del mercado durante lo que resta del año. “El segundo semestre tiene meses más fuertes que el primero, donde enero y febrero son históricamente los de menor consumo del año”, finalizó.