La llegada de Netflix permitió hace años anticipar un conflicto, finalmente hoy entre nosotros: los consumidores deben suscribirse a cada vez más plataformas para acceder a series originales. Dicho de otra manera: no alcanza con la TV paga, el cable, sino que es necesario suscribirse a Netflix, HBO y Fox para ver la mayoría de los estrenos. O volver a la piratería, que es lo que está sucediendo.
“La actividad de compartir archivos no está muerta. Con cada vez más opciones de contenidos y canales, los consumidores no tienen buenas opciones para acceder a todo lo que les interesa y por eso vuelve la piratería”, sentenció el informe Global Internet Phenomena, elaborado por Sandvine y en donde se mide la actividad del tráfico en la red.
«Cada vez más plataformas producen contenido exclusivo, solo disponible en su servicio de streaming, como Game of Thrones en HBO, Jack Ryan en Amazon Prime Video y House of Cards en Netflix«, explicó el vicepresidente de Sandvine, Cam Cullen.
«El acceso a todas esas plataformas resulta muy caro para los consumidores, que optan por pagar una o dos suscripciones y piratear el resto de contenidos», sentenció.
El comienzo
En sus inicios, Netflix tenía series completas de otras compañías, con Fox a la cabeza. A medida que la plataforma de streaming se hizo exitosa, muchos contenidos de la competencia desaparecieron y otros demoraron demasiados meses en actualizarse.
¿Por qué? En este caso, porque Fox presentaba su propia opción de streaming, por fuera de los servicios de TV paga.
Del otro lado, los consumidores debían pagar su abono al cable, Netflix y Fox para continuar viendo sus series preferidas.
Más sencillo: los contenidos están súper fragmentados y los consumidores deben pagar más para acceder a series, películas y transmisiones relevantes, sobre todo en algunos deportes, lo cual implica, a veces, estar suscripto también a TV paga.
La consecuencia de esa situación, deduce el informe, es la piratería.
En alza
Los archivos compartidos representan el 3% del tráfico globlal de descargas y 22% de subidas. El 97% de esa actividad está en manos de BitTorrent, tecnología empleada históricamente para compartir películas, series y videojuegos.
El porcentaje es mayor en algunas zonas. En Europa, Medio Oriente y África, el BitTorrent ocupa el 31,73% de las transferencias. En la zona de Asia-Pacífico, el porcentaje es similar.
El informe agrega que parte de la culpa por el aumento del uso de BitTorrent tiene relación con las demoras en el arribo de contenidos.
Recién empieza
La situación solo parece que empeorará. Disney ya anunció que retirará sus contenidos de Netflix (por ahora no en América Latina) en favor de su propio servicio de streaming.
Apple coquetea dese hace meses con su propia plataforma y ESPN, propiedad de Disney, también tiene en la mira su propio servicio online.
Todo indica que los usuarios deberán suscribirse a un insólito número de plataformas para ver contenido de calidad y actualizado. Eso sí, solo verán contenidos de su preferencia.