La pandemia logró que el mundo comenzara a hablar del fin del dinero físico, incluso en Argentina, donde el uso de billeteras digitales, cheques electrónicos, DEBIN y pagos mediante transferencias virtuales aumentó más de 40% en un año.
En sus casi 12.000 años de historia, los medios de pago pasaron del trueque, que apareció en el neolítico, a la acuñación de moneda por parte de los griegos, hasta llegar al billete y la tarjeta de crédito.
La irrupción de internet y un conjunto de tecnologías alteró radicalmente en un corto período de tiempo un ecosistema que, en rigor de verdad, poco había cambiado en siglos.
La nueva revolución vino de la mano de los medios de pago electrónicos, tanto desde sitios web como desde apps, todas potenciadas en medio de la pandemia, que obligó una adopción masiva.
Según datos del BCRA, las transferencias totales en pesos inmediatas y con acreditación en 24 horas cursadas a través de canales digitales aumentaron en abril un 41% en cantidades y un 17,3% en montos reales, en comparación con el mismo mes de 2020.
“Los medios de pago electrónicos permiten operaciones de manera virtual, sin utilizar dinero físico. Se caracterizan por ser sistemas sencillos, rápidos y por construir un historial crediticio que le permite a la persona tener un control sobre sus gastos”, resumió Francisco Chaves del Valle, gerente de Relaciones Institucionales de BKR, fintech especializada en inclusión financiera.
Una por una
Billeteras digitales
Están entre las herramientas más populares del momento dado que permiten realizar operaciones financieras, sin necesidad de poseer una cuenta bancaria. Eso incluye recibir y enviar dinero a otra cuenta de la misma aplicación, desde una cuenta bancaria u otra billetera virtual, pagar las facturas de servicios desde tu hogar, recargar celulares, pedir asistencia técnica y realizar retiros en efectivo en cajeros automáticos.
El último informe de COELSA, una de las compañías encargadas de la compensación de los pagos electrónicos en Argentina, aporta datos significativos sobre el lugar que ocupan dentro del ecosistema: de las 45,9 millones de operaciones de pagos electrónicos realizadas en enero, 13,9 millones correspondieron a estas plataformas. Aumentaron 2.000% contra los 670.000 de hace dos años.
eCheq o Cheque Electrónico
El eCheq o Cheque Electrónico, creado a mediados de 2019 por el BCRA, es un tipo de cheque emitido por un medio electrónico que puede ser endosado, avalado, negociado, puesto en custodia, cedido y depositado de manera virtual.
Para emitirlo se debe contar con el CUIT o CUIL de la persona y puede ser depositado en una cuenta corriente o caja de ahorro. Al recibirlo, puede ser aceptado o desconocerlo a través de la aplicación que utilice. Es decir, tiene las mismas prestaciones que el cheque físico, la diferencia es que tiene costos operativos más bajos, no requiere de la utilización de papel y se minimizan los motivos de rechazo.
Su crecimiento fue exponencial: saltó de 9.200 cheques electrónicos emitidos en marzo de 2020, a 700.000 en el mismo mes de 2021. Representaron, en esa última medición, el 15% del total de cheques y el 36% en volumen en pesos. Por su parte, los cheques de papel cayeron, en un año, de 5.000.000 de documentos por $473.000 millones a 3.800.000 de cheques por $454.000 millones.
Débito inmediato (DEBIN)
El nombre DEBIN alude a “débito inmediato”. Esta operación permite debitar fondos de la cuenta bancaria, previa autorización para hacer tu pago.
La utilización del débito inmediato (tanto crédito como débito) está entre las operaciones que explican el aumento de 82% interanual de las transacciones en los home banking, según figura en un informe reciente sobre Uso de Dinero Electrónico (UDE) de la red Link.
POS Móvil
Es un dispositivo que se conecta al celular o tablet para acreditar transacciones mediante tarjeta de débito y permite realizar el pago en el punto de venta a través de una transferencia inmediata. Es un aparato físico que funciona como un “posnet” tradicional, pero sin emitir comprobantes ya que quedan almacenados de manera virtual.
La coyuntura actual desalienta los contactos presenciales y se ve reflejada en la utilización del Pos Movil: en abril de este año registró caídas de hasta 9% respecto de marzo y 34% en relación con abril del año anterior, también de acuerdo a los datos de UDE Link.
Transferencias 3.0 y QR interoperable
El sistema de Transferencias 3.0 fue presentado a fines de octubre por el BCRA (link nota), luego de un trabajo conjunto entre el regulador, los bancos, las fintech, los procesadores de pagos y las cámaras compensadoras. La normativa propone una implementación escalonada hasta el 30 de noviembre de este año.
El sistema tiene como objetivo la interoperabilidad entre los diferentes QRs. Por ejemplo, que un mismo código QR pueda ser leído y pagado desde cualquier billetera virtual o aplicación. “Entre sus características se encuentran la inmediatez, porque los comercios reciben la acreditación de manera automática; flexible porque acepta tarjetas, QR, DNI, solicitudes de pago, entre otros; y económico al reducir los gastos del manejo en efectivo, ya sea en transporte, almacenamiento y seguridad”, resumió Chaves.
Desde la entrada en vigencia, los pagos «abiertos» con QR alcanzaron los 557 millones de pesos, según datos del BCRA al 31 de enero pasado. Se concretaron 100.000 operaciones en ese lapso. En tanto, el 23 de diciembre se alcanzó el récord diario de 13.498 operaciones por $50.711.548, empujado por las ventas previas a Navidad.
La meta trazada por el BCRA y el ecosistema de bancos, fintech y cámaras del sector financiero es que la tasa a la cual los pagos digitales le ganan al efectivo crezca hasta el 5% por año en los próximos tres años. Hoy alcanza el 1% al año.