Instagram negó contribuir a crear problemas de imagen corporal entre adolescentes, tal como señalaba la investigación publicada por The Wall Street Journal. Apenas unas horas después, la red social propiedad de Facebook anunció que pondrá una pausa al desarrollo de una versión enfocada en menores de 13 para potenciar herramientas de control parental.

La historia comenzó días atrás, cuando WSJ publicó datos de una investigación encargada por Instagram en donde se sostenía que la red social era “tóxica” y generaba, entre otros, problemas de imagen corporal, sobre todo entre chicas jóvenes.

Instagram negó las acusaciones a través de un extenso documento, afirmando que esa investigación y otras tienen por objetivo mejorar las experiencias de las personas dentro de la plataforma.

Ahora, Instagram decidió pausar el desarrollo de una versión de la plataforma para menores de 13 años, que recibió muchas críticas de parte de diversas organizaciones.

“Creemos que construir Instagram Kids es lo correcto, pero vamos a poner en pausa este trabajo”, escribió el jefe de Instagram, Adam Mosseri.

“Creemos firmemente que es mejor para los padres tener la opción de darles a sus hijos acceso a una versión de Instagram diseñada para ellos, donde puedan supervisar y controlar su experiencia, que confiar en la capacidad de una aplicación para verificar la edad de los niños que son demasiado jóvenes para tener una identificación”, agregó.

Luego de recordar que YouTube y TikTok tienen versiones de sus apps para menores, explicó que la idea de Instagram Kids es solucionar un problema cada vez más frecuente: “Los niños tienen teléfonos cada vez más jóvenes y están tergiversando su edad y descargando aplicaciones destinadas a los mayores de 13 años”.

La idea de Instagram es tomarse un tiempo para desarrollar nuevas herramientas de control parental y buscar consensos sobre cómo encarar la problemática.

“Si bien mantenemos la necesidad de desarrollar esta experiencia, decidimos detener este proyecto. Esto nos dará tiempo para trabajar con padres, expertos, legisladores y reguladores, escuchar sus preocupaciones y demostrar el valor y la importancia de este proyecto para los adolescentes”, finalizó.