Chrome es el navegador web más empleado del mundo, pero no se destaca precisamente por ser el más eficiente en el consumo de recursos, sobre todo el energético. Así se lo hizo notar Microsoft el año pasado en una comparativa en video.
De allí que Google haya decidido que Chrome comience a ser más eficiente. La versión 57 del navegador deja en stand by a las pestañas en segundo plano, responsables de una tercera parte del consumo de energía del browser.
El estado de suspensión es de 25%, pero Google quiere llevarlo a un 100% en un futuro, maximizando el impacto positivo entre los usuarios de portátiles, los más beneficiados por la decisión.
La nueva característica es completamente silenciosa para el usuario: Chrome se encarga por sí solo de confirmar qué pestaña no fue usada en los últimos 10 segundos para así apagarla.
El cambio no afectará a las pestañas que estén reproduciendo videos, audio o a aquellas con una conexión WebSockets o WebRTC, dijo Google.